Los valores son principios que nos permiten orientar nuestro comportamiento en función de realizarnos como personas. Una regla personal para un correcto proceder. Sin embargo, aunque la mayoría somos conscientes de esta palabra, existe un momento en donde se rompe aquello que se espera en cuanto a una forma honesta y correcta de comportamiento. Es cuando llamamos a las personas con doble moral o doble moralistas.
Este término se le atribuye a aquellos que pregonan una razón que se autojustifica pero que a la vez se contradice en su acción. Por ejemplo, alguien que habla sobre amar al prójimo y al momento de demostrarlo con acciones, discrimina a cierto tipo de personas o las juzga. Otro ejemplo es aquella persona que busca enseñar sobre el amor y vive una vida de odio. Así podrían ser cientos de ejemplos.
¿Qué es lo que pasa en la sociedad actual? En muchos lugares están listos para criticar los errores de otros, para juzgarlos cuando en realidad no están viendo los errores propios. Y esto sin contar los interminables temas que involucran un desafío real en donde ninguno se decide por determinar lo correcto y lo que es mejor para todos.
Por ejemplo, el tema del aborto, la perspectiva de unos es que para qué traer al mundo niños si solamente van a sufrir, otras opiniones sugieren que es un derecho de toda mujer, otros critican lo incorrecto de este tema, y mientras que algunos llaman asesinas a las personas que practican el aborto, otros lo consideran como algo positivo. Entonces para lo que genera muerte de un ser vivo, es considerado como un derecho, ¿se puede considerar como una doble moral en donde solamente beneficia al interesado auto justificándolo con el disfraz de los valores?
El sistema se corrompe poco a poco cuando podemos descubrir que la sociedad se va corrompiendo al grado de que ni siquiera reconocen lo que son los valores. Una jerarquía de valores que se van olvidando, en donde rige el placer físico, olvidando la retroalimentación de lo verdaderamente importante. En México es muy sobresaliente la polémica que generan estos temas. Las fiestas religiosas en donde muchas personas las festejan, sin embargo, a muchos no les importan los significados, esto no es solamente con estos detalles, sino que en muchos casos se suscitan los mismos pensamientos de libertad corrupta.
No hay que olvidar que inclusive la felicidad es motivo de frustración para otros, en donde el sistema pretende mantenerlos ciegos a las posibilidades de crecimiento emocional y moral. ¿cuántos temas más existen en donde se sabotean las labores positivas? ¿a dónde se llegará si los valores han sido olvidados? En donde el trabajo de unión solamente es una fantasía y falsa esperanza.
Es por esto que los valores no pasan de moda, no se olvidan y siguen siendo parte importante de los cimientos de la moral social que inicia desde la interacción familiar. Es posible reconocerlos si se les toma en cuenta como fuerza clave, como principio básico en donde lleva a retroalimentar la educación y elegir rechazar la ignorancia para poder crecer como personas dentro de la sociedad.