Septiembre 19, México sería testigo de una de las peores catástrofes en la historia, un terremoto de 7,1 grados, que afectaría estados del país como: Ciudad de México, Puebla, Guerrero, Estado de México y Oaxaca. Haciendo recordar al pueblo Mexicano el terremoto del 85’ el cual curiosamente ocurriría también un 19 de Septiembre. Para el día 26 de septiembre se registraría un saldo de víctimas de Ciudad de México 192 fallecidos, 74 en Morelos, 45 en Puebla, 13 en el Estado de México, 6 en Guerrero y 1 en Oaxaca. Sin embargo estas cifras van continuamente cambiando debido a las labores de rescate que se realizan día y noche, esto ha generado el aumento de muertos y heridos.
Pero, ¿qué otras secuelas existen tras esta tragedia?
Desgraciadamente, dichas secuelas han sido bastante decepcionantes y otras que son un tanto imposibles de asimilar.
La primera es el abuso de algunos medios (como la televisión) en la cual han caído en el amarillismo, esto sin contar con algunos otros que utilizan estos escenarios para crear sus noticias, produciendo la molestia del pueblo Mexicano, ya que están más preocupados por crear notas para la televisión en vez de apoyar a la causa. Y el ya conocido caso presentado en la televisión, en el cual se mostraba el supuesto rescate de una niña, la cual nunca existió. Burlándose completamente de las personas, y lo peor de todo es que realmente no se puede hacer nada contra estas empresas, ya que son tan influyentes como el gobierno mismo. Y simplemente fingen que nada sucedió.
El otro hecho que ha conmocionado, se trata de las personas que aprovechan la situación para comenzar a saquear los lugares y zonas afectadas.
Las despensas y apoyos alimenticios han sido robados por algunos abusadores (incluyendo del gobierno).
Mientras que artistas y personas reconocidas tanto por internet como por televisión se han dedicado a demostrar su alma de filántropos brindando supuestos apoyos pero haciendo gala de ello ante el público.
Todo un negocio para medios de comunicación, artistas, youtubers y algunos ladrones.
Lo curioso es que la verdadera ayuda se desvía para beneficio de algunos otros. Mientras que los que piden mayor apoyo no han recibido prácticamente nada. En algunas zonas de Oaxaca siguen esperando la ayuda, en otros lugares simplemente los verdaderos personajes que colaboran para rescatar a las personas siguen trabajando día y noche, pero como no son gran noticia, nadie habla de ellos.
Esto hace que nos demos cuenta que para mejorar una nación, efectivamente se debe empezar por establecer correctamente los valores humanos. La corrupción es una constante búsqueda de poder que se puede contemplar en todos lados, entre ricos y pobres. Y que las personas que brindan ayuda de corazón realmente no son tomados en cuenta, más sin embargo son quienes hacen grandes cosas, de manera silenciosa, pero que verdaderamente aportan para mejorar a nuestro país.